Manual práctico sobre los mitos del vino
Tercera parte.
Decantar,
o colocar el vino fuera de su botella en otro recipiente, ( un decantador de
cristal por supuesto), es el proceso de oxigenación del vino, dejarlo
“respirar”; esto con el fin de ayudar al vino a abrir sus aromas y texturas, en
el momento de transferir el vino desde la botella al nuevo recipiente.
Decantar
o no decantar, he ahí el dilema, es un tema que está a debate constantemente;
hemos visto en casa de nuestros amigos, o en las fiestas de algunos parientes,
como practican esta manera de tratar el vino; a veces solamente para enseñarnos
que tiene un decantador que utilizan con regularidad: Claro pregúntenle a su
esposa, la bronca para lavarlos después; pero sin tomar en cuenta esta
trivialidades, cuando estén en posibilidades de hacerlo, no lo duden, esto
llevará el vino a su máximo potencial.
Con
el tiempo, los vinos viejos, acumulan sedimentos con la desincorporación
gradual de pigmentos y taninos
El
sedimento es arenoso, y no es placentero tomarlo, así que separarlo mediante un
decantador, es una gran medida. Por otro lado los vinos añejos pueden también
adoptar aromas almizclados (uno de los aromas básicos que nos recuerdan
animales), y por medio de decantarlos ayudamos al vino a despertar los tonos
más afrutados. Hay que considerar que el vino se vuelve más delicado con los
años, así que cuando decanten un vino añejo, vayan despacio; vaciarlo demasiado
rápido podría sobreexponerlo (sobre-oxigenarlo) y potencialmente podría
arruinar el vino.
Sin
embargo un vino joven, se podrá beneficiar después de decantarlo. Un MALBEC
joven pudiera estar astringente y con muchos taninos al momento de abrirse,
como si tuvieran la boca llena de piedras. Dejarlo reposar en un decantador por una hora, más o menos,
ayudará a suavizarlo y beberlo resultara más agradable.
Al
final, sin importar la edad del vino, ustedes podían simplemente disfrutar la
apariencia que se consigue al poder observar un liquido rojo aterciopelado en
un gran decantador de cristal; esta sería razón suficiente para hacerlo.
MI
recomendación, compren un decantador de cristal, lo mejor que su bolsillo
resista, y prueben con un malbec joven: Concha y toro, Molinos o Canepa.
Empezarán a notar la diferencia.
Hasta
la próxima CHUPANDO que es gerundio.